Una Hagadá de Pésaj para toda la familia, con los textos en hebreo, español y fonética, según el rito Sefaradí y Ashkenazí.
Esta versión incluye comentarios frente a cada página de la Hagadá.
Tamaño: 16 x 24 cm.
Páginas: 254, en color.
Año de publicación: 2020.
Con gran agradecimiento y alabanza al Todopoderoso nos complacemos en presentar al público hispanohablante esta novedosa obra en español.
Después de más de un año de arduo trabajo, con la ayuda de HaShem hemos logrado reeditar una gran cantidad de notas, explicaciones y comentarios que recibimos del Rab Iona Blickstein shelita sobre la Hagadá de Pésaj. El Rabino Blickstein ha adquirido una gran experiencia al dirigir el Séder comunitario en varias instituciones y congregaciones importantes donde trabajó durante toda su carrera Rabínica, en Venezuela y en otros lugares del mundo.
Todo el material fue revisado y ordenado en forma adecuada a un libro impreso, para ofrecer una Hagadá de Pésaj de calidad.
En el mercado de libros hay un gran número de Hagadot, cada una con sus particularidades. Sin embargo, esta nueva Hagadá reúne las siguientes características especiales:
Una sola Hagadá, moderna y actual, para toda la familia: Al estimar la necesidad actual, consideramos que es necesario publicar una Hagadá para toda la familia, práctica y fácil de usar. Una Hagadá que despierte y llame a la lectura, y que ofrezca un contenido práctico, interesante y sumamente educativo.
El texto: En toda esta Hagadá figura el texto hebreo acorde a los Ritos Sefaradí y Ashkenazí, acompañado por una nueva traducción al español y una fonética. Todo tiene un diseño gráfico claro y bien comprensible, y en todo el libro hay indicaciones precisas para los que dirigen y siguen el Séder. Véase más adelante en detalle.
El tamaño: Optamos por publicar esta nueva Hagadá en un tamaño medio, ni muy grande ni muy pequeño. Así se podrá poner cómodamente en la mesa festiva, llena con los Simanim del Séder y colmada de personas.
Las notas y explicaciones: Esta Hagadá contiene interesantes comentarios, sutiles notas y bellas explicaciones sobre la fiesta de Pésaj y la Hagadá; la gran mayoría, de fácil comprensión para el lector.
Los agregados: Al material recibido se le ha añadido una gran cantidad de halajot necesarias. Las leyes y costumbres fueron escritas en forma clara y detallada, según la costumbre Sefaradí y la costumbre Ashkenazí.
Para facilitar el estudio de este libro, hemos tratado de dividir claramente toda la obra en diferentes secciones. Varias secciones reúnen básicamente contenido ético y moral, comentarios y enseñanzas de musar. Por otro lado, están las secciones de halajot, que reúnen una gran cantidad de leyes y costumbres. No obstante, el lector encontrará que en algunos temas ambos tipos de contenido se fusionan y entrelazan, así como es lógico, natural y bastante habitual en el estudio de nuestra sagrada Torá.
Las secciones de esta obra son:
Introducción: Una introducción general a la fiesta de Pésaj. Incluye “Perlas” para antes de la noche y “Perlas” para la noche del Séder.
El mes de Nisán y los días de la festividad: Líneas generales sobre los días del mes de Nisán y la festividad; y en detalle: las leyes de Jol Hamoed.
Jametz y matzá: Una explicación general sobre los alimentos permitidos y prohibidos en la festividad; algunos conceptos sobre la limpieza de la casa y las compras para el Séder; y “Perlas” para la búsqueda y la quema del jametz.
Leyes de la Keará y el Séder: Se explica todo en forma ordenada, siguiendo el orden de la noche y los Simanim.
El simbolismo de la Keará y el Séder: Bellas notas y explicaciones sobre los elementos de la bandeja de Pésaj, la noche del Séder y los 15 Simanim.
Artículos inspiradores sobre varios puntos del Séder y la fiesta de Pésaj.
Y por último: “La Hagadá de Pésaj para toda la familia”, la parte central del libro, con traducción y fonética, y con valiosos comentarios.
A modo de preámbulo
El Séder de Pésaj comienza con la recitación del Kidush.
El Kidush es la señal. Es la llamada que nos lleva a la bandera. No es igual, pero se asemeja al toque de trompetas cuando se ondea la bandera, o a la sirena que anuncia “tranquilidad”, que permite avisar que el peligro cesó.
Ese sonido alivia toda la tensión que se acumuló en aquellas horas de miedo y pánico, cuando el enemigo había atacado. Esa sirena cambia el ambiente; la gente sale de los refugios para respirar aire fresco. Una sonrisa se dibuja nuevamente en el rostro de la gente. Antes había preocupación; ahora, felicidad.
Así ocurre con el Kidush. De alguna manera esa es su función. Libera a las personas del “ataque enemigo”, del correr y correr por el sustento durante los seis días de la semana. Vierte sobre las personas un espíritu de regocijo.
Es la “señal de liberación” del ambiente cotidiano. Centraliza la atención del judío en el día que acaba de comenzar, santificándolo. Ahora cada yehudí despega hacia otra dimensión.
Ahí te sentirás diferente; respirarás aire limpio.
En la noche del Séder, el Kidush crea una distinción entre lo profano y lo sagrado, entre lo que fue y el ahora. Y el ahora es la eternidad. Aquella eternidad que encierra nuestro maravilloso pasado.
Al recitar el Kidush en la noche del Séder, nos llenamos de espiritualidad y nuestros recuerdos vuelan hacia el Egipto de entonces. Seremos partícipes de la gran experiencia que vivieron nuestros hermanos en Egipto. Junto a ellos pasaremos todas las etapas del sufrimiento y de la salvación. Esta noche estaremos envueltos de vivencias maravillosas.
EI Kidush se hace con vino. Porque no hay como el vino para cambiar el ánimo de las personas, siempre en la medida… “EI vino alegra el corazón de la persona” (Tehilim 104:15).
¡Que tengan un Pésaj kasher vesaméaj!
Les desea,
Rabino Iona Blickstein